El profesor debe recalcar el papel fundamental que cumple el arte en general y el teatro en particular en esta etapa de la adolescencia en la que educando precisa de valores y busca incorporarse al mundo en forma útil y creativa. El teatro como arte comunitario por excelencia, permite el logro de una real comunicación entre emisores (los actores) y receptores (el público), a través de un mensaje (texto), mostrativo de una determinada realidad.
Como en términos generales, los alumnos carecen del conocimiento profundo de teatro y no han actuado anteriormente, conviene seleccionar una obra sin mayores complicaciones de montaje, preferible corta o si la obra es extensa de estructura tradicional montar una parte de ella. Esto en relación con el tiempo que se dispone para el montaje de la obra, fin último del trabajo que se va a realizar. La selección debe ser conversada con los alumnos y ver los pros y contras de las obras factibles a representar.
Valoración de la obra. Una vez leída la obra en conjunto se hará hincapié en los valores que conlleva el texto, de su sentido de las ideas transmitidas y de sus elementos más significativos.
Ubicación espacio-temporal de la obra. La obra debe ser representativa de una época determinada, visualizada a través de lenguaje del texto y de las ideas implícitas en él.
Análisis interno de la obra. Análisis general del conflicto y de la acción dramático. El predominio de una de estas instancias configura un drama de acción, de personaje o de espacio.
Se lee el texto preocupándose ahora de ir dándole un mayor sentido a las diversas situaciones dramáticas. Guiados por el profesor los alumnos elegirán los personajes, cuyo trabajo de profundización y estudio debe empezar a realizarse.
El profesor tiene que explicar que el montaje de una obra implica un trabajo de carácter colectivo, en el cual todos los alumnos tendrán diferentes responsabilidades, todas de igual importancia. Consideraremos:
1. Director ayudante: aunque el profesor asumirá, en última instancia, la dirección de la obra, habrá un director ayudante quien colaborará con el director en la visualización del montaje. Es fundamental un esquema de dirección, un establecer desde el inicio del montaje la ubicación de los personajes, sus entradas y salidas, las correcciones de sus movimientos, todo dentro de la mayor libertad creativa asignada a los personajes-actores.
2. Productor: estará a cargo de la organización de la obra de teatro, buscando las formas y medios más favorables para la puesta en escena.
3. Actores: son quienes finalmente tienen la responsabilidad del éxito de la obra. Por eso, la elección de los personajes debe efectuarse en la forma más idónea posible, considerando condiciones, responsabilidad, capacidad de trabajo. Repitamos que no hay papel chico: todos tienen igual importancia en el contexto general de la obra.
4. Escenógrafo: se preocupará de las diversas decoraciones del escenario, lo que da lugar a que lea la obra y busque todos los signos emitidos por el dramaturgo en el texto. Es preferible que se busque una escenografía simple, sin complicaciones pero que ayude a la comprensión de la obra por parte del público.
5. Maquillador: conseguirá los elementos indispensables para un mínimo de maquillaje en los actores.
6. Iluminador: fabricará reflectores o tachos simples para crear una atmósfera escénica especial. La utilización de la luz debe tener relación con el clímax creado en la obra con los momentos más significativos en su desarrollo.
7. Encargado de la parte musical: puede que la obra exija una determinada melodía o no la elija. En todo caso, la música que se utilice debe tener relación con el sentido de la obra. Se preocupará de que el sonido se proyecte en las instancias convenidas.
8. Encargado del vestuario: conseguirá el vestuario apropiado al tipo de la obra y personajes, sin caer tampoco en la exageración ni sofisticación. Un vestuario muy simple y cómodo para el accionar del actor
9. Tramoyista: estará a cargo del trabajo técnico del manejo de la escenografía.
Cada uno de los ensayos se dividirá en tres partes fundamentales.
1. Ejercicios de preparación física. El director efectuará con los actores breves ejercicios de respiración, vocalización, movimiento, conocimiento del instrumento más significativo del actor: su cuerpo.
2. Ejercicios de improvisación. Se crearán diversas situaciones dramáticas, breves, las cuales se actuarán.
3. Ensayo con el texto de la obra para que los actores vayan memorizando el texto. - Preparar ensayos parciales Según la obra estos ensayos parciales serán por escenas y o actos hasta llegar a la totalidad.
Tiene por finalidad mostrar la obra como si fuera el día del estreno, es decir con todos los elementos configurados a través de las indicaciones anteriores.
Se cumple el objetivo de la preparación de una obra de teatro: su representación. Esta se optimizará en la medida en que cada uno de los integrantes del curso cumpla con sus trabajos asignados y tome esta empresa con la mayor seriedad.