Es el conjunto de hechos simbólicos y concretos, expuestos en políticas oficiales de gobierno para mantener a distancia a cierto grupo social. Esto implica la separación física y espacial, y la creación de normas y leyes propias en educación, salud, recreación, empleo y participación política.
Las expresiones más notables de segregación racial son el gueto en Alemania nazi, el apartheid de Sudáfrica y la discriminación a la población negra en Estados Unidos. En la actualidad implica colectivos como: los gitanos, los homosexuales, los enfermos de sida y los drogadictos a quienes en muchos países se les niega los servicios sociales. En América Latina y el Caribe el mestizaje cultural desdibuja y oculta las manifestaciones de la segregación y discriminación, pero son una amenaza latente.
Apartheid en Sudáfrica
La expansión de las ideas racistas y del darwinismo social a finales del siglo XIX sirvió de fundamento para la toma del poder político y la restricción del mismo a la población negra en el continente africano; empezando una política segregacionista con base en la supuesta superioridad cultural proclamada por los blancos.
La palabra apartheid significa separación y proviene de la lengua afrikaans, variante sudafricana del idioma holandés. El apartheid fue la política de segregación racial y de organización territorial aplicada de forma sistemática en el sur de África, desde finales del siglo XIX y oficialmente instituida de 1948 a 1990.
Entre 1899 y 1902, las cuatro (4) repúblicas independientes de África: Cabo, Natal, Transvaal y Río Orange colonizadas por holandeses, fueron sometidas y anexadas a las colonias británicas. En 1910 bajo la colonización del imperio inglés, se generó la unificación de los territorios y se fundó la Unión Sudafricana como un Estado autónomo, donde la Constitución reservó casi todos los poderes políticos a los blancos.
En 1913, se restringieron los derechos a los negros a poseer tierras, se les prohibió vivir en las ciudades, excepto cuando los blancos requirieran sus servicios y se les asignó áreas aisladas, llamadas bantustans, que carecían de los servicios y de las condiciones mínimas para ser habitadas. Para transitar por los sectores de los blancos, los negros debían tener un pase o permiso. Esta política de segregación garantizó la mano de obra barata para la explotación de las minas de oro y diamante en Sudáfrica.
En 1948 se institucionalizó en forma definitiva el apartheid; en 1950 con la ley de registro de la población se estableció la clasificación racial en tres (3) grupos: blancos, bantúes o negros y de color o mestizos y posteriormente se añadieron los indios y pakistaníes. El Estado fijó los lugares de asentamiento de cada grupo, los trabajos que podían realizar y el tipo de educación que podían recibir. También se prohibió cualquier tipo de contacto social entre las diferentes razas, autorizó las instalaciones públicas separadas de baños, playas y restaurantes y prohibió la participación de los no blancos en política. Las personas que se oponían al apartheid, se consideraban comunistas.
En 1960, el gobierno prohibió el Congreso Nacional Africano liderado por Nelson Mandela, quien fue arrestado en 1962 y sentenciado a muerte en 1964. En las décadas de 1970 y 1980, ante la presión interna y externa, el gobierno sudafricano intentó hacer del apartheid una política de “desarrollo aparte”, designando los bantustans como Estados soberanos, mientras la población blanca mantenía el control sobre más del 80% del país; lo cual originaron distintas manifestaciones de resistencia pacífica y violenta contra el Estado dentro y fuera del país.
A raíz de las huelgas y manifestaciones violentas entre 1795 y 1985, el gobierno aprobó reformas que permitieron la organización de sindicatos negros y cierto grado de actividad política; a mediados de los 80, la población negra exigió la liberación de Mandela, la eliminación de las leyes de segregación y el retiro de la inversión extranjera.
En 1984, la Constitución aprobó la participación parcial en el Parlamento de mestizos y población asiática, pero excluyó a los negros que constituían el 75% del total de la población.
El aumento de las divisiones políticas internas aumentó la violencia urbana, lo que generó mayor presión en el gobierno, entonces se revocaron las leyes de segregación.
En 1990, el presidente Frederik Willem de Klerk, tras negociaciones con representantes de las comunidades étnicas del país, puso fin al apartheid con la liberación del dirigente negro Nelson Mandela y la legalización de las organizaciones políticas negras; el proceso culminó el 17 de junio de 1990 con la revocatoria de la ley de registro de la población de 1950. Mandela, quien permaneció preso 27 años, fue elegido como el primer presidente negro en 1994, durante las primeras elecciones generales abiertas a los negros en la historia del país.
En Sudáfrica ya no existe legalmente el apartheid pero subsisten desigualdades sociales, económicas y políticas entre la población blanca y la negra.
Actividad
Segregación Racial en Estados Unidos
En la segunda mitad del siglo XIX, Estados Unidos atravesó una crisis política y social interna.
Los Estados del norte, republicanos, industrializados y burgueses eran partidarios de la abolición de la esclavitud; mientras los Estados del sur, demócratas, agrícolas y aristócratas, eran partidarios de la esclavitud porque necesitaban la mano de obra negra en las plantaciones de caña y algodón; lo cual desencadenó una guerra civil o guerra de Secesión que se extendió desde1861 hasta 1865. Finalmente, la esclavitud fue abolida en 1863 por Abraham Lincoln, quien asumió la presidencia en 1860 como representante del partido republicano.
La abolición de la esclavitud propició la contratación de millones de inmigrantes blancos europeos para las industrias del norte y luego en los Estados del sur, por lo cual una minoría de negros hallara empleo. La mayoría de hombres negros eran obreros no calificados y las mujeres se dedicaban a labores domésticos.
Estados Unidos consideraban a los negros como fieles servidores, respetuosos y obedientes, por eso los relegaron a emplearse en servicios personales y domésticos, parecido a la esclavitud.
Desde su liberación, la población negra fue sometida a una política de segregación racial, que se evidenció en:
Con la política de la segregación, algunas personas de los estados del sur de Estados Unidos emprendieron una campaña de exterminio de los negros y de sus descendientes para lo cual conformaron una agrupación llamada el Ku-klux- klan. Fue una organización secreta de naturaleza esclavista y Pulawsky, Tennessee. Dentro de sus fundadores estaban héroes y líderes de los antiguos estados confederados y su ejército.
El ku-klux-klan se caracterizó por:
El ku-klux-klan perdió influencia a finales del siglo XIX, pero resurgió con fuerza en 1915 en Atlanta con el nombre de Knights of ku-klux-klan; combatiendo negros y personas que no fueran norteamericanos o protestantes, como judíos, católicos, negros, amarillos y socialistas.
Sus principales centros estaban en Atlanta, Memphis, Knoxville, Chattanooga, Nashville, Richmon, y Birmingham; extendidos por Little Rock, Oklahoma City, Tulsa, Dallas, Forth Worth, Houston, El Paso y muchas ciudades del norte.
A partir de 1980, esta organización se fragmentó pero ahora se calcula que todavía existen muchos grupos de índole racista, que trabajan para atraer grupos derechistas radicales e individuos de ideas religiosas extremas.
Reacción Contra la Segregación
Las condiciones a que estaban sometidos los negros, generaron reacciones; el primero fue el primero de diciembre de 1955, Rosa Parks (mujer negra) se negó a ceder la silla en un autobús a un joven blanco y fue arrestada; lo cual desencadenó un movimiento de protesta y resistencia contra las leyes segregacionistas. Las jornadas de desobediencia civil y resistencia pacífica alentadas por Mater Luther King (1929-1868) dejaron al borde de la quiebra a la empresa de transporte, pues los negros se negaban a transportarse en los buses mientras existiera discriminación.
Tampoco volvieron a comprar almacenes, cafeterías y supermercados donde existiera segregación; las marchas fueron cada vez más grandes y muchos blancos se unieron al movimiento que fue liderado por King, quien defendió la política de no violencia, inspirado en la filosofía de Mahatma Gandhi (1869 -1948).
King enseñó a la población negra a responder sin agresiones, a pesar de los maltratos y humillaciones permanentes.
En 1964, el acta de derechos civiles prohibió la segregación en lugares públicos, y la discriminación en educación y empleo; pero seguía la violencia de la policía y de los grupos de klu-klux-klan y la discriminación en empleo y oportunidades.
Actividad
Antisemitismo
El antisemitismo es el odio, aversión o rechazo a los judíos.
Los judíos descienden del pueblo hebreo heredero de Moisés, y según la biblia, el pueblo elegido por Yahvé, que les ordenó apartarse de los pueblos y de las mujeres extranjeras para mantener “puras” las características étnicas, generándoles grandes enemigos por su religión monoteísta y por su estirpe.
Con la expansión del cristianismo en el mundo occidental, la discriminación por prejuicios religiosos s e generalizó, haciendo surgir un antijudaísmo sistemático y generalizado. Aparecieron los guetos por la intolerancia practicada por los cristianos y del deseo de los judíos de mantener su unidad y exclusividad. El Papa Pablo IV creó el primer gueto legal en Roma en el año 1555, también en Europa, durante los tres (3) siglos siguientes. A veces los judíos estaban obligados a llevar un identificativo cuando salían de su recinto.
A lo largo del siglo XIX, la comunidad judía logró equipara sus derechos con los demás ciudadanos, en la mayoría de países europeos; pero eran perseguidos por grupos antisemitas y ultranacionalistas. Especialmente en Alemania y en Francia, surgieron movimientos de oposición a los judíos, los antisemitas porque ellos basaban su oposición en lo que consideraban la raza judía: la semita. En Alemania, Francia, Austria y Hungría se reformaron partidos políticos para evitar que los judíos ocuparan cargos de importancia.
El Nazismo
En el siglo XX, la forma como se concebía al grupo dio origen a actitudes de discriminación, exclusión y segregación hacia “los otros”. En la tercera década del siglo XX, las teorías de superioridad de la raza blanca fueron tomadas por el partido nacional socialista nazi liderado por Adolfo Hitler (1889 -1945).
La idea fundamental del nazismo era reunir a todos los países de habla alemana en gran imperio, para ejercer la hegemonía directa sobre Europa y la dominación económica sobre el resto del mundo.
Las teorías racistas sirvieron para justificar la política de agresividad en las relaciones internacionales y de exterminio de judíos, gitanos, comunistas y grupos minoritarios considerados como amenaza para el imperio alemán.
La derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial fue atribuida a la traición del pueblo judío, dando un clima generalizado de rechazo, acusaciones y conspiraciones en su contra. A partir de 1929, con la llegada de los nazis y de Hitler en 1933, se inicia una serie de persecuciones antisemitas.
En el año 1935 se publican las Leyes de Nüremberg, con las cuales se niega a los judíos la ciudadanía alemana y se les expulsa de la vida económica y social del país, se le prohíbe casarse o tener relaciones con arios, tener empleados arios y entrar en la mayoría de parques públicos, teatros, hoteles y baños públicos y gradualmente fueron confinados en guetos.
Para los nazis, los judíos representaban el origen de todos los males y por lo tanto para salvar la humanidad había que exterminarlos, lo cual se convirtió en un lema patriótico, que se alimentaba por las concepciones religiosas y a la teoría racial, generó una actitud anti-judía violenta. Los planes de hegemonía mundial nazi difundieron la campaña antisemita en los países aliados al régimen alemán y en los países ocupados por el ejército nazi.
El 28 de febrero de 1933 se promulgó la ley para la protección del pueblo y del Estado alemán, mediante las cuales se establecieron los primeros campos de trabajo y concentración de judíos, que en 1941 se convirtieron en campos de exterminio. Este proceso condujo a la muerte de cerca de seis (6) millones de judíos de Polonia, Alemania, Austria, Holanda, Francia, Checoslovaquia, Grecia, Unión Soviética, Rumania y Hungría; y se conoce como Holocausto: acto inhumano y vergonzoso para la humanidad, que causó una gran conmoción psicológica y espiritual al pueblo judío. Sólo unos pocos judíos lograron huir de Alemania a Estados Unidos, Palestina, Gran Bretaña, Francia y Suramérica.
Actividad